jueves, 31 de diciembre de 2015

¡Feliz año nuevo!



La vida sigue y el año se pasó antes de que pudiese darme cuenta. 
Lo bueno: las vacaciones, las fiestas y celebraciones y un poquito de descanso.
Lo malo: que estoy muy cerca de estar un año más vieja. Oh Dio' mio

No se que piensan hacer ustedes, pero yo agradeceré por todo lo que pasó en el año, bueno y malo, por que me permite aprender y crecer, al fin y al cabo, creo que la idea de celebrar año nuevo es por las nuevas oportunidades y todo lo que pueda venir, y no para olvidarse de lo malo que pasó antes, que miren que he aprendido -y a la mala- que la evitación no te ayuda en nada al final, y que tarde o temprano vas a tener que enfrentar las cosas quieras o no. 

Así que aprovechemos de celebrar y disfrutar, y prepararse para un nuevo año, para tener la energía y las ganas de hacer lo que debemos, tenemos y más que nada lo que queremos hacer, y por qué no, pedir por que ojalá tengamos un poquito de suerte, que nos ayude también. 




Esperando que lo pasen increíble,

Marie M.

jueves, 24 de diciembre de 2015

Feliz Navidad


Chicos, no me miren así, que ya lo sé. Hace muchísimo que no escribo y es que he tenido un montón de cosas que hacer, que ya me impresiona, de verdad. Lo siento por eso, pero pronto tendré un poco más de tiempo y podré subir varios post que tengo por ahí guardados, y una que otra idea que se me ha ido ocurriendo. 

Esta es la segunda navidad del blog, y ni me había dado cuenta de que había pasado tanto tiempo. Mientras sólo les digo que aprovechen el día, estén con sus seres queridos y lo pasen excelente (comida y regalos incluidos, por supuesto)

Les dejo nuevamente unas imágenes que me gustaron y mis mejores deseos para todos. 

¡Una muy feliz navidad!

Marie M. 

martes, 25 de agosto de 2015

Desagrado

Y pues que hoy estaba procastinando con uno de esos típicos test de facebook -muy maduro, por supuesto- que te decía que personaje eras de la película intensamente o inside out, el nombre original.

No se ni por qué lo hice, por que la respuesta estaba tan clara como mi piel en el invierno, cuando no ha recibido siquiera un rayito de sol y tengo que encontrar bases que sean tipo "blanco fantasma" o "claro calavera". Pero me estoy desviando del tema. 

El punto es que, como era evidente, mi personaje fue desagrado. 


Y qué puedo decir, creo que es uno de los personajes de película que más me ha gustado. Y no sólo porque se parezca a mí, digo yo. Es graciosa y sincera, me agrada. 
El único problema es cuando se supone que debe encargarse de la ropa de Riley para el primer día de escuela. O sea, duh, obvio era una pésima elección desde cualquier punto de vista.



Así que decidí tomarme 10 minutos de mi súper intensivo estudio para escribir sobre esto y poner muchas fotos. Desde ahora ya no hay escusa para extrañarse por algún comentario o expresión que haga, están todos advertidos. 

Si ven a alguien en la calle haciendo estos gestos, o diciendo algo parecido, quien sabe y quizá podría ser yo. 


(está última es la mejor de todas)

Y pues si todavía no les queda del todo claro, les dejo unos segundos de muestra de mí, o sea de ella.

Marie M.







sábado, 8 de agosto de 2015

Loca por las compras


El nombre de este post calza perfectamente con la película excepto por Hugh Dancy, lamentablemente, ya se imaginarán por qué.

Muchas mujeres, y no únicamente nosotras, hemos perfeccionado el arte de tener dinero un día y poder gastarlo todo impresionantemente rápido. Una o dos horas, a veces incluso menos. No se si les pasa a todos lo mismo, pero yo incluso compro más rápido en las tiendas que online.

La siempre sabia Sarah Jessica Parker en Sex and the City dijo alguna vez: "Me gusta tener mi dinero donde lo puedo ver, en mi closet" y tenía mucha razón. De hecho, mis ingresos se gastan principalmente en dos cosas: ropa y comida (Lamentablemente mi gasto en esta última es más de lo que me gustaría, pero no puedo evitarlo. No soy tan fuerte)


Todo esto viene al caso porque hoy, cómo no, fui a comprar y no pude evitarlo. Gracias a Dios que a nadie se le ha ocurrido darme una tarjeta de crédito, sería una catástrofe. Una cosa es gastar el dinero que se tiene, pero si gastara además el que no tengo, ya estaría en la calle a estas alturas. Y es que sí, gente, es un problema.


Es por eso que me he acordado de la película.

Porque creo que no soy la única que se ha sentido identificada con ella, es más, estoy segura de que no.
Primero que todo, debo admitir que estoy impresionada por la cantidad de imágenes que encontré sobre el tema, en serio que Sophie Kinsella realmente entiende de lo que hablo. 
No creo en el extremo de necesitar comprarse todo lo que se encuentra, pero si me parece que comprar para uno mismo no tiene porqué ser malo.Es darse un gusto, al igual que decidir saltarse la dieta un día, o dormir hasta tarde sólo porque sí. 


Y que la frase que está escrita arriba tiene bastante razón. Al menos yo, cada vez que me siento ansiosa o aproblemada tengo dos opciones: o comer, o ir de compras. Y la verdad es que se agradece quedar con algo más que sólo kilos de más -no se equivoquen, que comer bastante ya lo hago normalmente todos los días. 

Pero ya parecerá que estoy haciendo sólo promoción de los beneficios -y que sí- pero esta vez también quiero hablarles del lado oscuro



Una salida de compras puede resultar realmente mal si no tienes idea de qué vas a comprar, sólo sabes que quieres algo. O si te pasas de la cuenta con los gastos, y te das cuenta de que quedaste debiendo más de lo que ganas mensual. 
Tratar de tener cosas sólo porque son tendencia es otra muy mala idea. Elegir algo porque te gusta aunque no te quede bien nunca es recomendable, y si no te gusta es peor todavía.

Estoy tratando de mostrar que para mí, el problema no son las compras en sí, sino los límites que tu mismo te pones -o la falta de ellos

Lo digo y que quede claro ya que el conflicto no siempre se da. Si te encanta ir de compras y no lo haces solo para olvidar tus problemas, perfecto. Si vas de shopping, no porque sea lo único que tienes para gastar tu tiempo, ideal. Si comprar no te hace problemas, porque tienes suficiente dinero para gastar en más de una vida, genial. 

Y aquí vengo yo de nuevo. Porque que no me lo he podido evitar y he gastado todo el dinero. Y lo digo literalmente, no me han quedado más que un par de monedas en la billetera. 
No se cómo lo hago, porque de verdad que soy buena ahorrando. El tema es que comúnmente sólo ahorro, para después gastármelo todo cuando se me ocurre ir de compras. 

Lo que siempre me hace sentir mejor, es que hay gente peor que yo. Sí, lo sé, muy empática. 
(Y la verdad es que he quedado contenta con mis adquisiciones). 

He aprendido durante estos años de experiencia algunos trucos y consejos que me han ayudado a salir adelante, incluso con lo difícil que se me hace tratar de no comprar algo una vez que se ha fijado en mi cabeza.


Por lo tanto, hoy les tengo 

1.  Nunca gastar más de lo que se tiene. Lo más importante. Ya vez que te creo completamente cuando me dices que tu vida será distinta con ese vestido precioso que está en exibición, porque definitivamente no será lo mismo si por comprarte ese vestido te quedas sin poder ni pagar las cuentas. Muy guapa te verás, pero si no te bañas porque te cortaron el agua, te aseguro que la gente te evitará por igual.

2. Compra primero lo que te sirva más. Y es que a todas nos pasa que vamos por un chaleco y lo primero que elegimos son los pantalones. ¿De qué va eso? O sea, entiendo que hay veces que encontramos esa prenda tan especial que lo queremos sin importar el costo. Pero hay que pensar claramente. Lo voy a poner en concreto, nuevamente. Los shorts esos con aplicaciones estarán monísimos para salir, pero no querrás ir con ellos al matrimonio de tu prima. Vamos a ver qué viniste a buscar en primer lugar.

3. Piensa a largo plazo. Tu futuro yo te lo agradecerá, de seguro. Las modas vienen y van y a algunas nos afectan más que a otras. Te diría que no compres nada de lo que cuando veas tus fotos en 5 años más te arrepientas, pero es que entonces no terminarías comprando nada. Pero cuando elijas algo, que sea porque estás dispuesta a usarlo hoy, pues si compras algo "esperando por la ocasión" es más que probable que esta nunca llegue. Piensen en mi yo de 6 años, cuando decidió que comprar ese vestido-tutú rosa que le quedaba grande era buena opción. Si le preguntan a mi yo de 9, definitivamente no estaría de acuerdo. Por lo que al final te quedas con esos ítemes en tu closet, guardados hasta que te acuerdas que existen o los encuentras por casualidad, y te das cuenta de que nunca los usaste y ahora ni aunque te paguen lo harás. Total pérdida de dinero.

4. No trates de rellenar el vacío. Que te lo digo yo, que he pasado por la experiencia más de una vez, que con tropezarme una vez con la roca no aprendo. Cuando tratas de tener más sólo para sentirte menos vacía, por más que compres, no lo vas a lograr. Y como si no fuera lo suficientemente malo, te dejará con más de una prenda que quizá ni te guste, sólo porque estabas lo suficientemente desenfocada como para no fijarte cuando lo pagaste. Yo voy de frente y creo que eso de utilizar la ropa no está bien. Ellas que están con nosotros en todo momento, casi, nos hacen sentir seguros y muchas veces incluso nos pueden levantar el ánimo, y ¿cómo lo pagamos? Usándolas vilmente. Si tienes un problema, vas y lo afrontas. Ya sea que termines llorando o satisfecha con como se resolvió, ahí puedes utilizar el momento para celebrar o calmar tus emociones. Pero el problema no va a mejorar porque lo evites. En el mejor caso se mantiene igual, rondándote, o puede hacerse peor. Mejor enfrentarlo ahora cuando todavía no se ha formado la bola de nieve completa. 

También, como dato extra, sugiero hacer una lista con lo que quieres/ necesitas, e ir tachando o marcando cada vez que tienes una. De esa forma puedes tener claro en qué has gastado tu dinero y se te hace más fácil distribuir lo que te queda. 


Si consideras mis consejos espero que te lleve a una experiencia de compras cómo debe ser. Saludable y gratificadora. Pues los que lo niegan, que o todavía no se dan cuenta de lo bueno que puede ser o que son muy necios para aceptarlo. Porque esto no se trata de gastar dinero, si no de darse un pequeño -o no tan pequeño- lujo, un gusto, con el que puedas sentirte bien ya que decidiste hacer algo para ti (sólo recuerda que no se sentirá tan bien, si no te pones ciertos límites, como conversamos antes).


Lo que respecta a mí, ahora deberé caminar por las calles sabiendo que tengo que empezar nuevamente a juntar dinero. Ignoraré los anuncios de las tiendas, y pasaré por el lado sin mirarlas, hasta que me decida que otra vez es momento de darme ese gustito. 





Esperando que mis aprendizajes les sirvan, me retiro

Marie M.


PD: quería darle las gracias a los amigos de tumblr, que nunca lo había dicho, pero de gifs, con suerte se escribir el nombre. En otras palabras, todas las imágenes que pongo y que -vamos a ser sinceros- hacen este blog más cool son de allá. 



viernes, 7 de agosto de 2015

Recuerdos


Hoy me he tomado un minuto para compartirles esto.

Es un texto que escribí hace mucho tiempo, en una de mis clases de biología del colegio, que ven que ponía mucha atención, claro. Al menos puedo decir honestamente que algo aprendí. Si bien no fue lo más importante de esa clase, mi profe podría estar orgulloso de que al menos un nombre me quedara, y lo usé para esta historia.

Se me vino a la mente hace unos momentos, mientras recordaba lo mucho que llevaba sin escribir, así que eso, se los dejo.

"Sentí que mis pies dejaban de tocar el suelo, y caí. Debieron ser un par de segundos, pero en realidad parecieron años. Veía cada gota, cada tono en el agua de la cascada, que me mojaba conforme bajaba, mientras daba vueltas en el aire. De pronto, me encontré en el fondo, nada más que azul a mi alrededor, no veía ni algas, ni rocas, ni peces, sólo agua. 

La natación nunca había sido mi fuerte, y aún más, la caída me había debilitado, sólo quería dejarme llevar por la marea, y fluir. Aun así me encontré respirando con dificultad, mientras mis brazos y piernas se movían, tratando de estabilizarse, de flotar. Me moví un poco, dirigiéndome hacia no sé dónde, hasta que mi espalda choco con algunas piedras. 

Fue entonces cuando la vi, una pequeña cueva, nada lejos de allí, que parecía todo lo que necesitaba. Protección, descanso y tranquilidad. Traté de salir a tierra firme, pero no fue sencillo, mis manos sangraban, llenas de rasguños, pero la verdad es que ya ni las sentía, el agua había estado demasiado fría. 

Tiempo después lo logré y tuve que quedarme un momento justo allí, en la orilla, de cara al suelo. Era demasiado esfuerzo, demasiado trabajo… ¿valía la pena? Quizá después de llegar a la cueva nunca nadie me encontrara, quizá me quedaría aquí por siempre, sola, abandonada. Eso me decía mi cabeza y también lo sentía, pero había algo en mí un instinto primitivo que me hacía aferrarme a toda esperanza, no importaba lo pequeñas que fueran las posibilidades. Debía sobrevivir. 

Cuando mi cuerpo dejó de temblar y mis piernas pudieron sostenerme me levanté. Dentro de la caverna no se veía nada, ahora, todo era oscuridad. ¿Qué más daba?, no podía volver al agua, así que caminé hacia el otro lado, hacia el interior de la caverna. Me afirmaba de las paredes, y cada poco rato, debía detenerme a descansar. Me negaba a quedarme tirada por siempre, aunque mi cuerpo me pedía a gritos que lo hiciera. Llegó un momento en que no estaba segura si quiera de si aún me mantenía viva. La oscuridad era tan profunda, tan penetrante. No veía el contorno de la cueva, tampoco mis brazos o piernas, ni siquiera notaba el lugar por el que había entrado, toda luz se había apagado hace mucho tiempo ya. Hasta que distinguí algo. Quizá era mi mente, tendiéndome jugarretas antes de que me volviera completamente loca. Aun así todo lo que me rodeaba dejó de ser negro y comenzó a ser rojo y verde.

Era como una loca y tétrica película de navidad. En la que probablemente todos los personajes morían. Ya no me movía por esfuerzo propio, había una fuerza que me impulsaba, que me acercaba a la luz, sin que yo pudiera evitarlo, aunque tampoco lo había intentado. Pero entonces algo ocurrió. Fue en el mismo instante que me di cuenta que ya no había vuelta atrás, por más que me rescataran, nada sería igual. Probablemente me mandarían a un psiquiátrico, si es que alguna vez salía, pero estaba viendo frente a ella a un pájaro. 

A decir verdad no estaba segura de que lo fuera, era muy extraño. Enorme, cada una de sus alas medía probablemente más del doble que ella en altura y que contenían todos los colores del arcoíris en ellas. Era de él que provenía la luz roja y verde, mezclados pero aún así cada uno se distinguía claramente. 

<<Archaepterix>> la palabra se le vino a la mente, sin tener idea de cuál era su significado. 
El Archaepterix estaba tendido en el suelo, sus espléndidos colores brillando ante mi mirada extasiada, impresionada. No me dí cuenta hasta el momento en que mi mano se posaba suavemente en el extremo de su ala, que estaba más cercano a mí. Era tan suave como parecía, quizá incluso más y me perdí en esa sensación un momento. Hasta que su enorme ojo se abrió. 

Blanco en su mayoría, una mínima pupila gris perla se podía distinguir sólo si mirabas con atención. Y me miraba, fijamente, sin pestañar ni moverse. Acaricié sus plumas, y profirió un leve sonido gutural, mientras levantaba la cabeza. Si hubiese tratado de describirlo probablemente no hubiera encontrado palabras apropiadas. Era tan único. Y parecía adolorido, herido. 

Se levantó lentamente, sus plumas temblando al igual que sus… ¿garras? Sí, eso era lo que salía se sus alas, garras, plateadas y afiladas. Y no sólo eso, en su pico habían dientes, varios, como los de un tiburón. 

De pronto no estaba más en la caverna, si no que estaba en un valle. La luz del sol, aunque tenue, hizo daño a mis pupilas, ya acostumbradas a la opacidad. Traté de ocultarme, busqué sombra, pero nada había que me sirviera. El lugar estaba destruido, no había pasto, ni árboles, sólo un inmenso páramo de color cobrizo, reflejo del fuego que antes se había posado allí. 

Todo cambió nuevamente y estaba en medio de una batalla. Literalmente en la mitad, personas iban y venían provistas de espadas, lanzas y cualquier otra arma que encontraran, por muy impensado que fueran. La sangre se esparcía por el suelo, y también por el aire, al compás de los golpes de cada caballero. Pero nadie me notaba. Sólo pasaban, a mis lados, a través de mí, sin inmutarse, sin advertir mi presencia. Todo volvió a ser negro. Me sentía mareada y mi cuerpo se liberó cayendo al suelo, sin fuerzas. 

No estoy segura de cuando cerré, ni cuando abrí mis ojos. Ni siquiera sé si lo hice, pero en algún momento una luz, pequeña, diminuta incluso, apareció en mi vista. Sólo un reflejo en el techo, pero que me permitió levantarme y comenzar a andar. A cada paso se hacía más grande más fuerte, y la verdad, ya ni me molestaba, mis ojos podían adaptarse con facilidad. Había una rendija lo suficientemente grande para que pudiera pasar y así lo hice. El pájaro. ¿Dónde estaba? ¿Qué había pasado con él? No recordaba el momento en que lo había perdido de vista. En el segundo en que el aire fresco tocó mi cara, todo pensamiento se esfumó de mi mente.

Sonreí, reí, por mucho tiempo. Hasta que miré mis manos. Parecían intactas, sin un rasguño, ni rastro de sangre."


Marie M.

PD: Sólo digo... recuerden que son las cavilaciones de una niña de 15 años. Y para que quede aún más claro, una niña que hasta los 14 prácticamente seguía jugando a las barbies -Sí, no se que pasa con las chicas de hoy en día, se creen demasiado grandes cuando ni siquiera han alcanzado su máximo de altura. 

domingo, 21 de junio de 2015

El día ha llegado




No se qué decir. Bueno, sí, pero eso suena suficientemente dramático.

(Aviso de utilidad pública: si ustedes creían que había sido dramática antes, no han visto nada. Sólo sigan leyendo)

Hoy era un día normal. Me levanté, desayuné, almorcé y todo como un día normal (sí, este resumen esta bien, lo que hago la mayor parte de mi día es comer) hasta ahora. Llego a casa y decido prender la TV y como todo domingo en la noche, sintonizo el HBO.
Ahí es cuando todo comenzó. Recordé que no hay más Game of Thrones.

khaleesi

Como si no hubiese sido suficiente, como si ya no lo hubiese sufrido. Darme cuenta de que la temporada terminó y quedó peor que nunca.
Yo ya no se que le pasa a esta gente, entre nuestra amiga Shonda y este hombre -porque desde hoy le llamaré así hasta que no tenga por confirmado que Jon sigue con nosotros- creo que vamos de mal en peor.
Qué pretenden, ¿dejarnos sin personajes? ¿Desilusionarnos por completo hasta que ya no quede nada de nosotros?-ok, quizá estoy exagerando. 
Ahora sí que es cierto que Winter is coming.

Y es que por muy dramática que soy, de verdad que me impresioné. Ese mismo día en dos segundos mi FB se llenaba de comentarios sobre el último capítulo y al otro día ya existían cientos de teorías sobre que pasaría.
Vean o no la serie, conozcan o no a los personajes, todos han escuchado hablar de esto. Yo sabía que la serie era popular, que mucha gente la seguía y siempre conversábamos de ella los lunes, pero esto ha superado mis expectativas.

Paseo por la calle y el centro comercial, y me encuentro con afiches que me confirman que morir te hace cada vez más popular- o casi morir, espero. Y lo peor de todo es que sigo sin saber cómo llegamos a esto.
Nos hemos hecho fans de una serie en la cual matan a todos los personajes favoritos así que ni se te ocurra apegarte mucho a uno que ya vas y te lo matan. Y que creo que lo hacen a propósito, empiezan a ver que se hace popular y deciden que es hora de terminarlo. Cabrones (no lean esto, que yo soy una dama, al menos lo parezco)


El otro día ví el capítulo online -porque ya les he dicho yo que soy lo más masoquista que hay, cosa con la que sufro, la repito ojalá fuera chistey veo comentarios en los que algunas personas empezarán a usar la frase "es más fácil que matar a un stark". Y que no lo dicen de broma, ¿cuantos de ellos quedan? Yo creo que de aquí a la próxima vez que aparezcan Rickon y Bran ya van a estar muertos o convertidos -que los white walkers se benefician de todo esto coño y nadie lo piensa.


Traté de leer los libros, de hecho sigo en eso, pero paso los mismos pensamientos/sentimientos que cuando vi esos capítulos, por lo que en este momento estoy en negación. No leeré más hasta estar mentalmente preparada para llegar a este final del último libro. Digan lo que digan, y pase lo que pase. Todo por una buena salud mental.

Así que ahora, con la televisión encendida, pero sin ver algo en concreto, escribo para contarles mi sufrimiento. Por que yo sé que lo sienten, incluso aunque lo nieguen. Pues que pensé "porqué no escribir el post más deprimente que haya hecho jamás para compartirlo con el mundo" y lo he logrado. Un nuevo record personal, que yo en general le encuentro diversión a todo, pero esto no me ha hecho gracia.

stark

Ya mostrado mi descontento y habiéndolo compartido con ustedes queridos, me retiro

Marie M.


sábado, 30 de mayo de 2015

¿La tercera es la vencida? /Grey's Anatomy

Chicos, esto es terrible. Puede ser un poco jaja poco atrasado, pero créanme que acabo de comprenderlo. Y todavía no me animo a creerlo. ¡Derek, oh, derek!

Yo pensaba que ya era suficiente, no, demasiado. ¿Y qué ocurre? Entro a ver el  capítulo de Grey's para encontrarme lo peor.

A estas alturas todo el mundo debe saberlo, pero sólo por si es que, desde aquí hay: 

¡ALERTA DE SPOILER!

Así que... (léase con la típica cancioncita triste del violín de fondo)
Yo pensaba que se había acabado. Yo imaginaba que con lo que nos había hecho sufrir sería suficiente, pero parece que nunca lo es. Shonda Rhimes nuevamente nos hace esto, y no puedo creer que yo se lo siga permitiendo. Pues es que la tía no se cansa, ¿cuantos personajes ya han sido? Fíjense que incluso perdí la cuenta. Pero mi imagen resume lo más importante. 

Pues, siendo sincera lo de George me dio lástima, pero ni me caía tan bien. Izzy se fue y no la quise ver más por lo que le había hecho a Alex (otro que me encanta, no puedo evitarlo). Lo de Lexie si fue triste, pero igual se opacó porque después le siguió Mark (todavía lloro cuando me acuerdo, eso sí que fue crueldad pura). Cristina... que puedo decir de eso ¿era necesario? ¿en serio? 
¿Pero Derek?!?! Es como que el mundo se hubiera desmoronado, o al menos el planeta Grey's Anatomy lo hizo. El hombre perfecto, el que nos enseñaron a querer, a admirar, incluso cuando su cabello dejó de ser tan perfecto o cuando casi ni salía en la serie. 
Y como si fuera poco, fue en UN capítulo. Un mísero capítulo para matar todas nuestras ilusiones y todo en lo que creíamos y considerábamos seguro.  En serio Patrick, no sé cómo permitiste que esto ocurriera. Estoy entre indignada y terriblemente triste. 

Lloré -bueno, ya sé que soy bien llorona, pero no lo hace menos terrible- y desde el principio. Lo juro, en el momento en que le dio la mano a ese bombero -después de haberle salvado la vida a 4 personas, by the way- ya estaba llorando. Y es que era obvio. La forma en que partió, como lo mostraron, era evidente lo que ocurriría. Por que después de todo tipo de ataques, accidentes impensablemente poco comunes, e idas sin ningún sentido, Shonda ya nos ha enseñado cuando prepararse. 

Tengo el sentimiento encontrado de entre querer dejar de ver la serie por siempre y a la vez querer seguir viéndola, no sea que ahora se le ocurra acabar con Alex o Jackson de repente (ya ven que nos estamos quedando escasos de galanes). Y todo eso de Meredith estando embarazada, o sea, wow. Dios, cómo nos hace sufrir esta mujer. 
Sólo quería expresar esta ola de sentimientos que me viene de repente,  así como cada vez que prendo la TV y veo uno de los comerciales, o cuando abro We Love It y hay miles de fotos de Derek y gente llorando por él. 
Estoy con ustedes amigos. 

Ahora necesito tomarme un respiro antes de empezar a llorar #girlygirlstuff

Y sí, tenía que poner otra foto de marksito, por que nunca está de más. 

Marie M.


PD: Wait! ya encontré la canción Lista de shindler

lunes, 23 de marzo de 2015

Miami


Me gustaría decir que estos días estuve de vacaciones, viajando, descansando (bueno, también hice eso un par de semanas), pero la verdad es que la mayor parte del tiempo he estado trabajando. Sí, como una responsable y adulta mujer trabajadora. O casi. 

Ya empezando la universidad tuve práctica de inmediato y eso me ha tenido ocupada, pero nunca lo suficiente para no concentrarme en mis objetivos futuros, las metas para "más allá".

Es por eso que vengo a contarles algo increíble, maravilloso, supremo y ya no se me ocurren más sinónimos. ME VOY A MIAMI. 


Sí, así tal y como se escucha.

Sol, calor, playa, verano, y cocodrilos en las piscinas. 

No se imaginan lo contenta que estaba cuando me enteré. Ya comencé a imaginarme el día a día, los chicos, las fiestas, jajaja
Bueno, la verdad es que me voy de intercambio, así que igual el estudio estará en mi itinerario. Pero no me preocupa. Lo que si me complica (además de los cocodrilos everywhere) es el pelo.

Sí, tonto y todo lo que quieran.

Sólo imaginen la maravillosa mezcla entre una enorme cantidad de cabello + humedad + calor + playa ¿Qué resulta? Extra frizz. Genial.

Todo dato, comentario o consejo es bien recibido tanto por mi como por mi pelo. Gracias.

Y así se acaba el informativo de hoy. 
Más adelante habrá más información sobre las fechas y alguna que otra idea que se me habrá ocurrido (inofensivas todas, obviamente)


Con todo mi amor, me despido

Marie M.

miércoles, 28 de enero de 2015

I Love: especial SAG

Ya ven, aquí entro yo, dándomelas de especialista en moda #MeCreoCool. Que puedo decir, sea como sea que yo ande por la calle, igual comento sobre el resto, que eso como a muchos bien se nos da. Y me gusta, lo admito. No hay alfombra roja que me pierda (imagínenme sentada frente a la TV rodeada de comida, sí, gross) y que no haga mi propia elección de los mejores y peores vestidos. Son lo que más y menos me gustó, de ahí a que mi gusto sea bueno, eso es otro tema (sólo pregunten sobre mi último novio, mejor no).


Voy a partir con el vestido que apenas lo vi, lo amé, fue instantáneo como en las películas. Como si no fuera suficiente con su sencillez y limpieza en las líneas, es rosa (no puedo evitarlo, me mantengo girly por mucho que lo niegue). Así que un aplauso para Felicity Jones, y este increíble Balenciaga. 

 Felicity Jones 
Emma Stone también lucía súper bien, aunque en un estilo muy distinto. La verdad es que si bien no estoy segura de que fuera algo que yo ocuparía, creo que le va increíble y es más o menos lo que ella siempre busca, usar algo distinto. 
Y no puedo evitar mencionar lo bien que queda ese lipstick en el conjunto.

 Emma Stone

Quien también me llamó la atención fue Emmy Rossum con este Armani plateado . Lo único que le resta puntos es que en las fotos se ve un poco plano, pero cuando caminaba por la alfombra roja, los brillos y el diseño de la tela se notaban de una forma, que hace de este vestido el atuendo perfecto, al menos para mí. Es delicado, femenino y tiene un toque como de cuento de hadas. Me encanta. 
  

Y por último no podía dejar afuera una mención honrosa para Keira Knightley, a quien actualmente admiro por haber elegido este vestido y no uno como "el Chanel" (espero que se entienda, por que no pretendo hablar de ese). El color le sienta, los aretes los amé y además tiene el crédito extra por que siempre es más difícil vestirse para estas ocasiones embarazada. 


     Keira Knightley & James Righton

Eso es un mini resumen de todo lo que pasó en esa premiación y un poquito de mi gusto, para que lo compartan o no esten de acuerdo, De mi parte, una estrellita para todas las chicas que mencioné y la verdad es que me encantaría tener todos esos trajes en mi closet (aunque no tenga donde usarlos, duh).
Estaré pensando si es que decido hacer un post sobre los peores vestidos también, no lo sé... (sí, todos sabemos que lo más probable es que lo haga)
Entonces, hasta pronto

Marie M.

martes, 6 de enero de 2015

The Theory of Joy


Hoy mientras estaba en la universidad, se me vino a la mente algo que decidí llamar The theory of joy, o la teoría de la felicidad, como traducción aceptable. 

Antes que cualquier otra cosa, quiero pedir perdón si es que ya existe una teoría con este nombre, que no quiero terminar con una demanda por plagio ni nada por el estilo. Just saying.

(así ven que mi mente funciona para pensar en esto, pero no para encontrarle un nombre un poquito creativo, duh)

Es algo realmente sencillo y puede sonar obvio, pero en realidad… ¿Cuántas veces en verdad lo tomamos en cuenta? ¿No es cierto que a veces lo evitamos por creer que no es bueno? Sólo escúchenme (léanme) y díganme que opinan.

Pensé que para hacer el mundo un poquito más feliz, bastaba con sólo una acción, sea pequeña o grande, corta o larga. Una acción para tú ser más feliz. Imagínate cuanto mejor podría ser un día con tan sólo tomarte 5 minutos para hacer algo que te haga feliz. Puede ser comer algo que te guste, o escuchar una canción, o simplemente darte un par de minutos para estirarte en la cama antes de levantarte. Algo que te haga feliz.  Obviamente, para esto no hay una receta, vieron que en gustos no hay nada escrito y creo que todos conocemos al menos una cosa que disfrutamos y nos provoca alegría.

Me dijeron que era egoísta, que no era un aporte real y que no ayudaba.

“Seguro, obviamente si estás contenta el mundo se ve mejor a tus ojos, pero eso no significa que sea cierto”

Es válido, pero soy suficientemente terca para que no sea suficiente para cambiar mi opinión.

“¿Sólo hacerse feliz a uno mismo y que no te importe el resto? ¿Cómo eso puede ser bueno?”

Y eso que yo nunca dije aquello. Es una acción, no una vida de privilegiar sólo lo que a ti te interesa por sobre todo el resto. Es ser feliz.

No hay situaciones buenas o malas por esencia (o al menos así lo creo yo), sino que todo depende de cómo tú reacciones al respecto. ¿Qué vas a hacer? ¿Lo tomas como un castigo o como aprendizaje? ¿Hay alguien que en realidad pueda castigarte más que tú mismo?

Esta reacción, el cómo se toma una situación puede cambiar considerablemente con tu humor, con ese 10% más de felicidad que te da el comerte un chocolate que te gusta en la mañana. Así que sí, una sola acción puede cambiar tu día, y obviamente, como seres relacionales que somos, cambias la de todo el resto. No es que por tu andar enojado le arruines el día al resto, pero ¿qué tan maravilloso es subirte al metro y ver a alguien sonriendo? ¿Qué te dejen pasar, o te den el asiento cuando te sientes realmente mal? O tú mismo, ayudando a alguien no por deber ni obligación sino porque lo sientes.
Siendo tu un poco más feliz cada día, puedes hacer más feliz al resto. Todos ganan.

Suena sencillo, hermoso, casi mágico… pero ¿Lo hacemos en el día a día?

¿Qué es lo malo de poder aprovechar una parte de tu día en ti, en estar bien? Yo todavía no he podido entenderlo, y sí puede que haya algo mal en mí, así como puede que no. Probablemente un poco de ambas.
Sólo pienso… ¿Es posible? ¿Cuán difícil es? ¿Ayuda en algo?